1983-2000
Serie fotográfica sobre barcos varados en las costas de Chile y Brasil. Este registro se ha extendido desde un primer registro intuitivo antes de tener una formación fotográfica hasta consolidarse en un proyecto creativo en los años noventa.
El viaje y el arribo, el traslado y la detención, la aventura y la zozobra. El seguir barcos y construcciones que han “varado”, literal y metafóricamente en el tiempo, parece ser el motivo que atraviesa, como si fuera su derrotero creativo, el trabajo de Reinhardt Schulz.
El conjunto de imágenes obtenidas a través de emulsiones argénticas y técnicas diversas, parece ya proponer un suerte de itinerario, de ida y vuelta, a través de la historia de la fotografía.
Si lo queremos apreciar así, en esta muestra existen sobrados elementos que se identifican con lo que podríamos llamar una “geografía” productiva, en la que se combinan, recorriendo tiempos y espacios diversos, los eventos del naufragio y su representación en base a procedimientos químicos alternativos.
Las consecuencias estéticas de tal operación no se hacen esperar, ya que estas obras cargan el espacio en que se encuentran con una fuerte pátina visual. A través de ella el suceso y los navíos comprometidos no sólo “regresan a tierra”, en un sentido metafórico, sino que parecen hacerlo en plena materialidad. Tal efecto es el que se logra con la acción de las formulas químicas, que los vuelven a mostrar como si hubieran acumulado el peso de su propia historia, convirtiéndolos de esta manera en un espectáculo de arte.
Otro ingrediente de esta exposición, y no menos importante, es el de la crónica. Esta no implica solamente el seguimiento de los casos navieros, su investigación y posterior registro. Se trata de algo más, cercano al relato, a la diégesis de lo acontecido y el imaginario que esto produce en el artista. La intuición sobre los hechos y la nostálgica interpretación a la que dan cabida, resultan en una ficción poética. En ella las admirables construcciones flotantes efectivamente varan, sólo para hacernos soñar ante su imponente presencia. Al descubrirlas en estas imágenes es como si viéramos no sólo un naufragio, con toda la ruina que trae aparejada, sino que el misterio de un acontecimiento enmarcado en la más profunda y oscura acción de la naturaleza. Es el repudio del océano materializado en la expulsión de aquel cuerpo extraño, una revulsión sanitaria de las mareas, las corrientes y los bancos de arena, quizás.
Fragmento texto curatorial.
Germán González Quiroz
17 Junio 2014